Nuestra historia de amor

Primer Encuentro
Recuerdo el día en que nos conocimos como si fuera ayer. Nuestras miradas se encontraron por un segundo y, aunque no dijimos mucho, sentí algo especial. Fue un momento simple, pero desde entonces todo cambió. Ese fue el comienzo de algo bonito, algo que aún hoy sigue creciendo.
Primera Cita
Nuestra primera cita fue algo especial. No necesitábamos hacer nada extraordinario, simplemente estar juntos era suficiente. Las risas, las conversaciones que parecían no tener fin, y la sensación de que el tiempo pasaba demasiado rápido. Fue en ese momento que supe que quería más de esos días, más de ti.


Propuesta
En ese momento, todo a nuestro alrededor desapareció. Solo estábamos tú y yo, y con el corazón latiendo más fuerte que nunca, supe que era el instante perfecto. Te miré a los ojos, tomé tu mano y, con todo mi amor, te hice la pregunta que había soñado desde hace tiempo: "¿Te casarías conmigo?" Tu sonrisa, tu mirada, y ese "sí" que me hizo sentir que el mundo entero cabía en ese instante.
Compromiso
El día que nos comprometimos fue uno de los más especiales de mi vida. No era solo el anillo, ni las palabras que intercambiamos, sino el sentimiento de saber que, a partir de ese momento, estábamos eligiéndonos para siempre. Fue una promesa de amor, de apoyo incondicional, y de construir juntos un futuro lleno de sueños compartidos. En ese instante, todo cobró sentido: tú y yo, y el camino que tenemos por delante.
